Los diarios digitales, los de
papel, los programas de radio y televisión… todos se hacen eco de una de las
grandes noticias del día de hoy y que se hará realidad mañana. Zapatero y Rajoy
se reunirán mañana, martes, en Moncloa. Esto no sucedía desde hace 18 meses.
Concretamente, desde octubre de 2008.
Dicen los expertos que los
principales asuntos a tratar en esta reunión serán el rescate financiero de
Grecia, en el que participará España si nada lo remedia, y las posibilidades de
reforma del sistema financiero español.
Eso dicen los expertos, con
escasas diferencias de opinión entre ellos. La unanimidad, casi al cien por
cien, podemos hallarla en cuanto a lo que anticipan sobre resultado de esta
próxima reunión. Rajoy hará sido citado para que ZP se haga la foto con él en
las escaleras de Moncloa, y poco más.
El antecedente que existe de este
encuentro es el anteriormente citado de octubre de 2008. En las hemerotecas
quedó escrita la opinión de Mariano Rajoy, que declaró al poco de finalizar el
encuentro que se sentía engañado y que todo había sido una pérdida de tiempo.
Ahora, en el presente, la mayoría de diarios digitales que he consultado y
programas de radio que he podido escuchar coinciden que se repetirá la
historia. Que la reunión servirá para bien poco, o absolutamente para nada.
En mi opinión, esto no es más que
una estrategia de los socialistas para guardarse las espaldas, en caso de que
alguien les critique por no haber querido buscar consenso con la oposición para
vencer la crisis. La principal pista sobre esa intención me la ofrece el
reciente comentario de la impostada Leire Pajín, en el que procura transmitir a
la opinión pública que el gobierno de Zapatero está trabajando duramente por
vencer esta crisis y que espera que el Partido Popular haga un esfuerzo por
colaborar de una vez en beneficio de España. Extraña manera de invitar al
dialogo a alguien, dejando primero bien claro que ese alguien es quien
entorpece la recuperación de España. Ya se sabe que el lenguaje subliminal
funciona bien entre los electores entregados, y Pajín es experta en escenificar
culebrones cuando tiene micrófonos delante.
Además de las opiniones de
periodistas y comentaristas de radio, la apreciación de oyentes y lectores
coincide, casi al completo. Es bien triste ver cómo el pueblo español ha
perdido hasta tal punto la confianza en sus políticos, que da por sentado que
mañana, en La Moncloa ,
lo que sucederá será un simple gesto a la galería. O, si se quiere, una absurda
pérdida de tiempo.
Espero que estemos todos
equivocados.
La reunión ha sido penosa. Zapatero con su positivismo sin argumentos. "Tenemos datos para hablar de recuperación" decía, pero nadie sabe todavía cuales son esos datos de los que habla.
ResponderEliminarDe lo que sí creo que han hablado es de una especie de tregua política. Seguro que ahora se suaviza lo de Garzón, lo de Bono y lo de Gurtel.
Un saludo