
Soy republicano convencido, confeso y reconocido entre los que me conocen. Cuando surge la ocasión. procuro explicar a quien me escucha que ser republicano no significa necesariamente ser de izquierdas, aunque ambos conceptos suelen ir asociados en la opinión de la mayoría de la gente este país. Yo he sufrido esa idea muchas veces:
- ¿Y tú que opinas del Rey? ¿Qué te parece?
- Bueno, yo soy republicano y…
- ¡Ah! Entonces eres de izquierdas…
Llegará un día en España en el que República dejará de equipararse a la CNT, a los anarquistas, a la FAI o cualquiera de aquellas facciones que durante los 3 últimos años de república en este país camparon libremente por la ultra izquierda, cometiendo las mismas tropelías que los diferentes grupos de ultra derecha que se llenaban la boca concediéndose plena autoridad de salva patrias por la gracia de Dios.
Mientras tanto, tendré que seguir explicando que un buen numero de las grandes potencias y países mas avanzados del mundo son republicas, y ninguno de ellos es precisamente de izquierdas. Que esas, las repúblicas de izquierdas, son las que estrepitosamente se han venido abajo, en colapso general, después de funcionar a base de dominación y terror hacia sus ciudadanos.
Pero lo cortés no quita lo valiente. Así que, por mucho que me rechine ser “reinado” por una familia real a la que llamar majestades, altezas y otras prebendas mas, por no hablar del nivel de vida – y por tanto, de tranquilidad – del que disfrutan por ser seres superiores ante los que se debe inclinar la cabeza, no estaré nunca de acuerdo con las pandillas de brutos que se cuelgan la etiqueta de republicanos y queman fotos del rey para ir luego a hartarse de porros y calimocho, exactamente igual que cuando apoyan una manifestación de ocupas pacifistas antisistema que arrasan y saquean tiendas mientras profieren aullidos a favor de la libertad y la fraternidad de los pueblos.
Me parece muy bien que el rey, en su mensaje de anoche a la Nación, (¡¡¡perdón!!! No pretendo ofender a nadie. Mensaje al Estado) haya defendido que todos necesitamos una cultura de unidad. Creo que a quien debería decirle eso expresamente es a nuestro particular presidente de gobierno y a sus socios independentistas, siguiendo después por los responsables del gobierno y del PSOE que, durante esta legislatura, lo unico que han hecho ha sido procurar aislar al PP y su electorado en un corral de culpa y cordón sanitario, por ser de derechas o de centro y discrepar.
Cultura de unidad, claro. Estoy de acuerdo. ¿¿¿Pero que cultura de unidad se le puede pedir a la mitad de un país que se vuelve con rabia contra el otro, después del 11-M, en lugar de buscar responsables entre los terroristas???
En fin, que feliz Navidad a monárquicos y republicanos; a apolíticos y a pasotas. Incluso a los que celebran el solsticio de invierno porque son tan progres y del bando de los “buenos” que no desean ofender a los no cristianos. A todos, feliz Navidad.
Y les dejo con Su Majestad y la cultura de unidad. A ver si nos aplicamos el cuento.