Situémonos en cualquier fabrica con, pongamos por caso, una plantilla de 350 trabajadores, en cualquier polígono industrial de cualquier localidad española. ¿Qué sucedería si un buen día se presentaran a trabajar veinte?. ¿O treinta?. ¿Que qué sucedería? Lo que sucede en nuestro Congreso de nuestros Diputados, unas cuantas veces al año. Que no funciona de pena.
Hace poco vi en televisión un reportaje sobre el creciente absentismo laboral en estos tiempos de crisis. Muchos trabajadores fingen motivos de baja laboral para poder cobrar e ir a otro trabajo a echar unas horas. Tal parece que sea este el problema actual del Congreso.
Hay diferencias, por supuesto. A un trabajador pueden enviarlo a la calle si reincide en esta actitud una o dos veces más, mientras que hay diputados que se pasan legislaturas enteras acudiendo el número mínimo de veces necesarias para que no le llamen la atención y dedicándose a cualquier otra cosa. Y quien tiene que vigilar que eso no ocurra, lo permite.
En realidad, pienso que estas actitudes de pasotismo y absentismo “cobrado” son la punta del iceberg del comportamiento general de la clase política que estamos soportando gravosamente sobre nuestros hombros. Desde estos diputados invisibles, bajando hasta ciertos alcaldes, secretarios y concejales de pequeñas localidades, encontramos miles y miles de casos en los que los servidores públicos hacen y deshacen con total impunidad.
Los gastos superfluos de semejante fauna parásita no pasan solo por los recientemente conocidos de automóviles oficiales suntuosos, despachos impresionantes o dietas escandalosas e inmerecidas. Hay más. Muchísimo más. Y la justicia no actúa, porque no quiere. Y creo que los gastos superfluos y ostentosos de ciertos políticos son el síntoma más revelador de lo que se puede encontrar detrás de ese comportamiento. No es casualidad que en cualquier sitio de España que conozcamos en el que se estén dando situaciones similares acaben saltando a los medios la mayoría de los casos de corrupción.
Yo podría citar ahora mismo varios municipios de la comarca en la que vivo, en los que si se presentaran inspecciones por sorpresa, del tipo “dejen todo como está y no toquen ni un lápiz”, no habría vehículos de
Si me limito al área donde yo vivo y sus cercanías, puedo comentar casos como el de algún tipo que, viviendo una situación económica personal calamitosa, gana las elecciones municipales, llega a alcalde y pocos años después incrementa su patrimonio a la velocidad del rayo. El primer verano en su cargo, se vá de vacaciones con toda su familia a uno de los países más caros del mundo. Los viajes de verano al extranjero pasan a ser una costumbre. Compra un local, compra plazas de garaje, abre un restaurante…
Como el de un concejal de urbanismo, muy de izquierdas él hasta que llegó a la concejalía por otro partido menos de izquierdas (se supone). En el sorteo de viviendas protegidas le toca un piso cuando, por ética si no por moral, debería haber salido del sorteo al llegar a un cargo público. Otro caso parecido fue el de un pueblo de al lado, en el que en un sorteo de similares características, les tocó un piso a cada una de las hijas de un alto cargo de aquél ayuntamiento.
O el empecinamiento, por parte de un alcalde, de modificar unas instalaciones públicas, para poder recalificar un terreno rústico como edificable, con varios pisos de altura, dejándolo así revalorizado de un modo escandaloso. ¿La propietaria? Concejal del partido, por supuesto.
Y para contar, y contar, y contar, y no parar, solamente en esta comarca. Supongo que donde vivan ustedes la situación será similar.
Si las bases de nuestro sistema público están corruptas hasta tal punto, con el mirar de la justicia hacia otro lado, me da miedo pensar cómo estarán las instancias superiores.
¿Por qué se permite a individuos de esta calaña que sigan escalando posiciones hacia las diputaciones y parlamentos regionales, desde donde intentan dejarse ver para fichar por la política nacional?
¿Qué sucede en las poblaciones pequeñas, para que estos políticos, podridos sin disimulo, salgan elegidos una y otra vez?
¿Cómo funcionan las cosas dentro de un partido político, para que no se despida a un corrupto a no ser que sus chanchullos salgan a la luz?
Oigan, que no puedo dejarles sin personificar de nuevo la situación, con otro ejemplo de los que me dan ese tipo de ardor que solo me alivia el bicarbonato. ¿Cómo puede un señor en paro, convertirse en alcalde y establecerse, de la noche a la mañana, en promotor urbanístico, ponerle una peluquería a su esposa, y construirse para la familia una casa que yo no podré permitirme jamás?
Muchas preguntas para un artículo. No se que pensarán ustedes. Yo siempre llego a la misma conclusión. Los votantes tragan con todo. Y repiten.
Esa imagen del parlamento es una auténtica vergüenza.
ResponderEliminarSaludos
Creo que tenemos la peor clase política del mundo, como ya apuntan es una vergüenza ver esa foto.
ResponderEliminarSaludos
Simplemente lamentable, pero el problema es que los ciudadanos sólo contamos una vez cada cuatro años
ResponderEliminarY todavía dice Pepinho Blanco que"los políticos en España cobran muy poco"....
ResponderEliminarEs vergonzoso e indignante, que con la situación que estamos pasando,con las colas del INEM a revienta calderas,los comedores sociales desbordados y gente apunto de perder susu hogares por no poder hacer frente alas hipotecas,veamos a estos golfos zanganear de sus escaños.
ResponderEliminarLa partitocracia en estado puro.
Vemos un escenario donde la cultura europea, y todo lo que conlleva, está en peligro. La cultura occidental y sus valores están al borde de la desaparición. Si no ponemos remedio pronto, seremos exterminados en muy poco tiempo. Es irónico pensar que hay muchos europeos que desean este exterminio de cultura y forma de vida. Y me gustaría ver sus caras si algún día un yidahista obliga a sus hijas a vestir un burka (esto ha ocurrido en lugares como Afganistán o Irán. España, Europa entera, no sería una excepción). Seguro que no les hará mucha gracia.
ResponderEliminarEntra en nuestro Blog udcc.wordperss.com y opina. También puedes contactar con nostras con los correos electrónicos: derechoshistoricos@hotmail.es derechoshisto@gmail.com.
Necesitamos un cambio y juntos podemos hacerlo.
Toda la razón Mike,....
ResponderEliminarDe verdad que te esmeras y no se de donde sacas tanto tiempo para escribir tanto y tan bién....
Siempre me leo todos tus artículos por que no tienen desperdicio...
Saludos... Paco..
P.D. Dedícate en serio a esto.. de verdad.
Desde arriba hasta la bae, no hay mas que podredumbre.
ResponderEliminarNo vuelvas a rozar la política, que te corromperas.
Saludos!