Isabel del Río
¿Qué papel ha jugado la mujer en la Historia del Arte? Parece
una pregunta retórica si tenemos en cuenta los ríos de tinta que sobre igualdad
de género se han vertido en los últimos tiempos. Sin embargo, el
desconocimiento de los logros y las luces que las mujeres han aportado en este
campo sigue siendo grande y cualquiera que no se haya interesado
particularmente en este tema no sabría dar una respuesta segura.
No es de extrañar porque si echamos un
vistazo a los índices de los manuales y los libros de texto en que se basan las
enseñanzas regladas de nuestro país, no hallaremos a ninguna pintora o
escultora y por tanto concluiremos que, como mucho, su papel ha sido el de
modelo o musa de mayor o menor influencia.
Tampoco la mayoría de las exposiciones que
se han venido celebrando en los últimos tiempos han mejorado el vacío de datos.
Muchas han tratado el tema del arte y la mujer pero han incidido más bien en
cómo los artistas masculinos la han retratado o en los trabajos de pintoras y
escultoras de la edad contemporánea, omitiendo a la casi totalidad de las que
vivieron en siglos anteriores.
¿Las hubo? ¿Fueron en su época dignas de
consideración? ¿Realizaron piezas que innovaron las técnicas e ideas de su
momento? ¿Influyeron en artistas posteriores? ¿Vivieron de su trabajo con
independencia y libertad? Son preguntas que parecen extrañas porque hemos sido
educados para pensar que en los siglos XVI o XVII, por ejemplo, las mujeres
tenían que estar obligatoriamente sometidas al varón y que cualquier intento de
manifestar su creatividad iba a ser severamente reprimido o, incluso,
castigado.
Pero los datos (si se comprueban) manifiestan
lo contrario. Catharina van Hemessen, Sofonisba Anguissola, Lavinia Fontana,
Artemisia Gentileschi, Judith Leyster, Anna Therbusch, Anne Vallayer-Coster o
Elisabeth Vigée-Lebrun realizaron trabajos que, en su momento, fueron tan
cotizados como los de Claudio Coello, el Greco, Van Dyck, Caravaggio, Rubens o
Poussin y pudieron no sólo ser reclamadas por los prohombres de aquellos siglos
sino ser dueñas de su destino y desarrollar en plenitud su creatividad. ¿Por
qué entonces ahora, cuando tanto se incide en los términos “igualdad” y “género”, siguen siendo tan desconocidas?
¿Por qué no se las incluye en los temarios de enseñanza?
A mí me parece importante superar la
imagen, porque es falsa, de una mujer sometida durante milenios y resignada a
su triste suerte. En el ensayo “Las Chicas del Óleo, pintoras y escultoras
anteriores a 1789”
que acaba de publicar editorial akrón, cito a más de doscientas mujeres
artistas que hicieron de su profesión su vida y que hoy hemos olvidado… Un
olvido que urge resolver y que, sin ser demasiado malpensados, se infieren
sospechas que transformarían el olvido en comportamientos poco claros de cara a
dignificar el pasado femenino.
Mike he andado con problemas, enferma y sin compu. Si viste pasé casi 10 dias sin actualizar, ando en una laptop prestada por momentos, así que por ello me fue imposible responderte. Los blogs efectivamente no fueron actualizados no se las razones, averiguaré y te diré. Abrazos
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