El autor del blog amigo
El Rincón de la Libertad, desde Houston, Tx., hace una breve declaración de
principios que me parece verdaderamente interesante:
Comprendo perfectamente
por donde va. En España no existe un conservadurismo que pueda ser muy
equivalente al conservadurismo anglosajón que existe en países como Estados
Unidos. En España, la gran mayoría de los que se definen como conservadores
están, en realidad, más allá de esa línea y se encuentran en territorios que
más tienen que ver con el autoritarismo que con la libertad. Y en esto tiene
mucho que ver, el entorno cultural, social y religioso que muchos de ellos han
conocido desde siempre, y que les impide, o mejor dicho, les alienta, a ignorar
y despreciar otras opciones conservadoras que ellos, desde su más absoluta
ignorancia y enclaustramiento ideológico, consideran absolutamente desechables.
Ésta es una de las maldiciones que España arrastra desde hace unos siglos y que
tantas oportunidades ha hecho perder a nuestra nación. Sé perfectamente de lo
que hablo porque, como republicano, liberal, conservador, y cristiano no
católico, he vivido durante décadas el rechazo, y en ocasiones un cierto
sectario desprecio por parte de no pocos “conservadores” que me consideran
izquierdista por ser republicano, hereje por ser creyente y practicante no católico,
masón por ser liberal, y sionista por respetar, estudiar y compartir mis
orígenes judíos. No digamos ya cómo me califican muchos izquierdistas, por idénticos
motivos.
Así que comprendo
perfectamente la posición de José García Palacios en su blog, y no he podido
por menos que añadir éste mi comentario en su post:
“Yo me considero conservador en ciertas cosas, pero
no identificado con el conservadurismo mediterráneo. El gran problema de muchos
conservadores en España es que confunden conservadurismo con tradicionalismo.
Siendo casi todos ellos católicos, están ideológica y culturalmente atados a
tradiciones que creen correctas por el hecho de ser tradiciones. Es un modo de
pensar muy español. Como también lo es el ser de izquierdas justificando todo
lo malo que han hecho las izquierdas porque eso lo han hecho los
"suyos" y los malos son los fachas.
Respecto al centrismo en España, poco bueno tengo
que decir. Si el centrismo lo encarnan Ciudadanos, que se mueve a golpe de
encuestas y a las órdenes de lo que dicten los masones franceses y Soros, o
cierto sector del PP que se considera centrista... Apaga y vámonos.
En mi experiencia, en España no hay cultura
política. No hay afán político como servicio a la nación. No hay apenas
políticos con agallas para oponerse a aquello de sus partidos que no les gusta.
Lo que hay es clientelismo y una galopante falta de
dignidad”.
Leer aquí la contestación de José Graía Palacios en su blog.
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